29 Ene Fracturas en Veterinaria: Guía Práctica para un Manejo Exitoso en Perros y Gatos

Las fracturas son rupturas del tejido óseo que ocurren cuando las fuerzas aplicadas superan la resistencia del hueso. Pueden ser provocadas por traumatismos externos (atropellos, caídas, golpes) o por condiciones patológicas (fracturas por desgaste o asociadas a enfermedades metabólicas). En la práctica clínica, las fracturas son una de las principales razones de consulta en urgencias veterinarias, sobre todo en perros y gatos de mediana y gran actividad.
De acuerdo con Fossum (2018) , hasta un 20% de las cirugías de emergencia en caninos se relacionan con el manejo de fracturas, lo que subraya la necesidad de mantenerse actualizado en el diagnóstico y tratamiento de este tipo de lesiones.
Tipos y Clasificación de las Fracturas

Para un abordaje correcto, resulta esencial clasificar las fracturas en función de su localización, trazo y complejidad. Entre las clasificaciones más utilizadas destacan:
- Según el trazo de fractura:
- Transversales
- Oblicuas (cortas o largas)
- Espirales
- Conminutas (múltiples fragmentos)
- Según la exposición:
- Cerradas
- Abiertas (expuestas)
- Según su localización anatómica:
- Diafisarias (en la diáfisis del hueso)
- Metafisarias
- Epifisarias
Fracturas por estrés o patológicas : Asociadas a patologías óseas (osteoporosis, tumores) o microtraumatismos repetitivos.
Fracturas Más Comunes en Perros y Gatos
- Fractura de la tibia y peroné: Suele ocurrir por accidentes de tránsito o caídas.
- Fractura de Radio-Cúbito: Muy frecuente en razas pequeñas de perros; Es posible que se requiera una fijación interna estable.
- Fractura Femoral: Habitual en traumatismos de alta energía, puede necesitar osteosíntesis con placas y tornillos o clavos intramedulares.
- Luxaciones y Fracturas de Cadera: Frecuentes en atropellos. En algunos casos, se requiere artroplastia de la cabeza femoral.
- Fracturas Mandibulares y Maxilares: Pueden estar asociadas a mordeduras o traumatismos cráneo-faciales.

Diagnóstico de fracturas
El paso inicial es la evaluación clínica y la estabilización del paciente. Posteriormente, se efectúan los diagnósticos por imagen:
- Radiografías : Son la técnica principal para detectar fracturas. Normalmente se requieren dos proyecciones perpendiculares (lateral y dorsoventral o craneocaudal).
- Tomografía computarizada (TC) : aporta mayor detalle en fracturas complejas, especialmente en huesos planos (cráneo, pelvis) o articulaciones.
- Resonancia Magnética (RM) : Útil cuando se sospechan lesiones de tejidos blandos asociados (ligamentos, meniscos, médula espinal) o fracturas que no se aprecian fácilmente en radiografías.
Tratamiento de las fracturas
Manejo inicial
- Analgesia y control del dolor : Empleo de AINEs, opioides y analgésicos multimodales.
- Inmovilización temporal : Uso de férulas o vendajes para reducir el movimiento del foco de fractura antes de la cirugía.
Tratamiento definitivo
- Reducción y Fijación Interna : Placas, tornillos, clavos intramedulares y cerclajes. Este método ofrece estabilidad y promueve la consolidación.
- Fijación externa : Indicada en fracturas abiertas o cuando la anatomía dificulta la colocación de implantes internos.
- Artroplastias : En casos de fracturas articulares graves o degeneración severa, se pueden considerar cirugías de reemplazo o resección articular.
- Rehabilitación Postoperatoria : Es esencial la fisioterapia, hidroterapia y los controles periódicos para vigilar la formación de callo óseo.

Complicaciones y prevención
En la consolidación de fracturas, pueden surgir complicaciones como el retardo de unión, pseudoartrosis, infecciones, fracturas de implantes y problemas de consolidación por mal alineamiento. Para reducir estos riesgos, se recomienda:
- Técnica quirúrgica aséptica y minuciosa.
- Selección adecuada de implantes según la localización y tipo de fractura.
- Seguimiento radiográfico para evaluar la evolución de la consolidación.
- Control de peso y restricción de actividad en la etapa inicial de la recuperación.

Las fracturas constituyen una de las principales causas de cirugía de emergencia en medicina veterinaria, exigiendo a los profesionales un manejo integral que abarque desde la estabilización inicial hasta la rehabilitación postoperatoria. Conocer los tipos de fracturas, comprender las técnicas de diagnóstico por imagen y elegir el tratamiento quirúrgico o conservador adecuado son pasos fundamentales para mejorar el pronóstico y la calidad de vida de los pacientes.
Mantenerse al día en métodos de fijación avanzados y protocolos de rehabilitación potencia la eficacia de los tratamientos, garantizando un retorno funcional óptimo y un menor índice de complicaciones asociadas a las fracturas.
Referencias (formato APA)
- Fossum, TW (2018). Cirugía de animales pequeños . Elsevier.
- Johnson, AL, Houlton, JEF y Vannini, R. (2016). Principios AO de manejo de fracturas en perros y gatos . Wiley-Blackwell.
- Piermattei, DL, Flo, GL y DeCamp, CE (2006). Manual de ortopedia y reparación de fracturas en animales pequeños . Saunders/Elsevier.